lunes, abril 05, 2010

Moscas y elefantes

He visto cómo entramos en un jardín luminoso,
es una fiesta blanca
los arbustos, los árboles,
la fachada de la casita de la piscina,
el cinturón punk que corona tu cintura de cobre,
todo tiene esas luces blancas de interior
que parpadean despacio como si de su funcionamiento
dependiera
el corazón de un elefante.
Casi soy alguien cuando hay poca luz y nos miramos a los ojos
compartiendo las pulsaciones de un ciclista que duerme
o las de un bebé que lucha por su vida
con un soplo en el corazón.
Te miro el pelo,
querría caminar por Madrid contigo como si fuéramos moscas
rápidos, con recorridos cortos y errantes,
dando mucho por culo a los oídos de los seres humanos;
no dejas que te toque el pelo ningún peluquero, oh girl
te lo cortas tú sola
te tiñes tú sola frente al espejo con tintes de super
en tu pelo hay anillos de árbol y así sé la edad que tienes,
oh girl.