martes, agosto 30, 2005

Por fin mañana

Y te das cuenta de que eres joven

y aun no te han abierto la cabeza,

es tiempo de probar, tomar drogas, quizá

amar a quemarropa y

fuegos artificiales

revolviendo el mar de noche,

antes del beso, decirle:

“eres el estribillo de mi vida”,

seleccionar los poemas

que te hacen llorar, las películas,

las mujeres, llorar en la siesta

y ser un titán al despertar.

Eres joven, eres un titán

de dientes relucientes,

disfruta la tristeza, paladéala

como un juego difícil de aprender,

como matemáticas,

u olvidarte en un descuido.

Eres un boxeador -lo dice tu sombra-

no te cabe el corazón en el pecho,

tu sonrisa es el interruptor

de los días.

jueves, agosto 25, 2005

El último beso de amor

…el olvido sólo

se llevó la mitad”

J.M.Serrat

El último beso que te di

fue a un fajo de billetes de 50,

me había quitado previamente

el sudor de la frente y tenia dos canciones

de moda alicaídas en las orejas.

Yo tenía esa pose de querer acabar

con las semillas de azafrán de mi mentón,

a pesar de tu insistencia, de tu me gusta

que piques un poco. No todos los pijamas

son tan amarillos ni retrasan el verano

hasta dejarlo blando y lejano,

como tu cuerpo de puntillas bajo

la lluvia de luces estoboscópicas;

qué mareo, calzando una vida

de otro con más suerte.

Bebo sorbos minúsculos, para dar de si

el momento hasta poder ver la luna

a través de él, como las radiografías

en los eclipses, no puedo con tanta iluminación,

busco pues, la penumbra o morada natural

de los desamparados.

Es un placer llevarte el desayuno a la cama,

sobre todo cuando aun sigues caliente

en la billetera.

sábado, agosto 20, 2005

Maquillaje

Fluyen días despacio,

con ojos de cañería rota,

el viento diminuto repta

por la carretera

-solo se detiene para

hacer autostop-

paro, para que entre por la ventanilla

¿Recuerdas cuando había

alguien que se maquillaba por ti?

me pregunta, y baja el volumen de la radio.

Yo también pongo dos mantas

en mi cama de Invierno, allá donde duermo

detrás de las montañas, bajo los charcos

o en la ranura de las alcantarillas.

Me pide que le hable de mí, poca cosa:

dos fugas de gas, ningún coche,

tres semáforos en verde

enfureciendo al resto de los conductores,

la estaba besando, ¿sabes?, si, estaban hechos

de lana puntiaguda, si, hay canciones

que estarían dispuestas a testificar.

El viento lleva una boina

y solo le quedan dos dientes, pero mira

el asfalto con cara de haber visto la muerte

en todos sus amigos:

de un infarto, de cáncer, quizá; apoyados

en la pared con los ojos vendados,

en la época del alcanfor y agua

en pantanos, leche y sopa.

Ahora hay una pastilla para cada cosa, dice,

pero los médicos no saben medir el dolor

en arrobas -¿se podrá morir de pena

como los perros?-

Se baja en medio de los cultivos

y pide disculpas por las molestias.

sábado, agosto 13, 2005

Juventud



It's a long ... lonely journey ... from death to birth

Michael Pitt

Así que era esto. Los restos de sopa

se agarran a mi barba débil para evitar

morir en mis entrañas.

Hay mucho silencio por la mañana,

los sueños duermen, los pájaros ensayan

su composición musical en su cuarto

en un tronco vacío, casi muertos.

Era esto, que un día representara

una vida entera, con ganas de tumba

a la hora del vermú, los niños

imaginan su postre al fondo del congelador

donde mamá guarda el dedo del abuelo,

su pensión aún paga vacaciones.

Me permito el lujo de no olvidarte

- por eso de que los días tengan luz- ,

a pesar del salivazo de cuando te asomas

a mi pozo de herrumbre, de cuando

no te asomas. O miras allí arriba

y yo escojo las gotas de mi vida para ti.

Te doy las que no saben a fracaso, las que

hacen una fiesta en tu boca cuando

los besos orbitan el planeta del incienso

[y las noches últimas.

Era esto lo que deparaba la juventud,

pensar en un volantazo en carreteras sin asfaltar.