Ha llegado el verano, me paso las horas que estoy despierto
construyendo con mi imaginación, un buen sitio donde estar;
es un trabajo muy duro
me aparta de hacer mis tareas en el trabajo, me aparta
de acordarme de algunas tareas como comer a su hora
o comer en general
me aparta de mirarme bien al espejo para advertir
unas ojeras que se van profundizando bajo mis ojos
llenos de ilusión
es un trabajo duro la construcción del sitio
y digo construcción porque muchas veces es un edificio
donde yo soy arquitecto, albañil y vigilante jubilado de obra
todo al unísono
y digo unísono, porque en el sitio hay música y el sonido
de los elementos cuando abres la ventana;
a veces es un edificio y una persona nueva desconocida para mí
cuyo rol en la vida yo interpreto con mimo,
me cuesta mucho mucho levantar esta edificación-hogar
y cuando duermo [voy durmiendo a ráfagas este verano nuevo]
y despierto
mi cabeza es un telesketch al que han agitado con mucha alegría
y tengo que volver a empezar con la pantalla desmaquillada
y es verano
y eso significa estar solo.